La locomotora Crown de Michael Jackson en Iowa después de ser reparada

La locomotora más grande de Neverland Valley Ranch contaba con el número de construcción 37936 y es un diseño Crown 4-4-0 construida en el año 1973. Originalmente fue pintada de azul con detalles en plateado y dorado, con las ruedas rojas y tiraba de cuatro vagones.

Su construcción fue encargada para el parque Carowinds de Paramount en Carolina del Norte. Su constructor fue Crown Metal Products, un fabricante de locomotoras situado en Wyano, Pennsylvania.

Al poco tiempo que comenzó a rodar quedó fuera de servicio ya que las autoridades del parque decidieron levantar las vías del ferrocarril.

Luego de su desmantelamiento fue comprada por Charles Kelton de Vermont, EEUU quien lo utilizaría como atracción, pero pronto desapareció el interés y fue puesta nuevamente en venta.

En abril de 1993 alguien la compró en reserva. Esa persona era Michael Jackson. Toda la maquinaria que se encontraba levemente deteriorada fue enviada a un taller de Mt. Pleasant, Iowa.

Detalle frontal de la máquina sobres los rieles de prueba del Midwest Central Railroad
 

Michael Jackson nunca viajó al lugar pero constantemente llamaba por teléfono para comprobar los avances. Las pruebas de rodamiento se realizaron en el Midwest Central Railroad. Se le colocó un motor nuevo, una linterna frontal y nueva decoración en su frente. 

Matthew Crull, ahora el presidente de directores del Midwest Central Railroad, era para entonces un trabajador por contratos y cuenta sobre el proyecto “básicamente terminé suspendiendo mi primer año de universidad, entrábamos a trabajar a las 3.30 de la tarde y salíamos a las 5 de la mañana. Trabajábamos básicamente viendo el reloj para cumplir con la fecha limite del contrato”

Como es de esperarse el tren era como ningún otro. Las modificaciones incluían letras de 24 kilates de oro, un sistema estereo de 45 mil dólares, y alumbrado a todo lo largo del tren,. La caldera construida en Des Moines, incluyendo un sistema computarizado, el primero de su clase, que permite que el motor sea controlado por una sola persona.

Debido a la popularidad del cantante, el proyecto fue secreto “todos debimos firmar para MJJ Productions que ni siquiera le daríamos a nuestras familias en lo que estábamos trabajando”. “ para ese tiempo, yo aun vivía en casa con mis padres y no les podía decir en lo que estaba trabajando”

Y para evitar que los transeúntes notaran algo, el motor solo se probaba de noche, usualmente desde la medianoche hasta las 3am.

 Solamente la nueva pintura costó 11.000 dólares. Las bóvedas de cobro amarillo pulido fueron pintadas con la iniciales del nuevo dueño.

La locomotora fue bautizada "Katherine" en honor a la madre de Michael Jackson.

Ahora era propulsada por propano en vez del aceite que utilizaba en sus orígenes.

El 20 de noviembre de 1993, seis meses después de la compra, la locomotora y los vagones modificados a pedido del nuevo dueño, viajaron destino a Neverland Ranch en California.

El tendido de la línea férrea fue realizada por un contratista profesional, que luego de las primeras pruebas debió modificar parte del tendido ya que la locomotora provocaba mucha fricción en las curvas.

Fotografías tomadas tres días antes de que la locomotora y los vagones viajaran a Neverland

Locomotora ya en funcionamiento en Neverland Ranch

Momento en que le instalaban los equipos de sonido y luces a la locomotora bautizada "Katherine"

Certificado que se entregaba por haber viajado en el Neverland Rail Road

La formación más pequeña recorría las diferentes atracciones del rancho llegando inclusive al medio del parque de diversiones.

Frente de acceso a la Estación de Trenes Principal




Vista lateral de la formación y su recorrido

 

La locomotora llevando a una de las estaciones intermedias

 

Montaje de los rieles en Neverland Ranch

Rob Swinson, que instaló las locomotoras y otras atracciones en el rancho de Neverland, recuerda que fue el 30 de Octubre de 1990 cuando Michael Jackson estrenó sus trenes. Ese día también quedó inaugurado el carrousel.
"Michael, ¿quieres tomar un viaje en tren", le pregunté. Se estaba haciendo tarde,  y yo estaba muy emocionado cuando él respondió: "¿Crees que es posible? ,. le recordé, "Michael, por supuesto! Es tu tren! " 
Nos sentamos en el tren y recuerdo que me decepcionó un poco cuando vi que Michael había elegido un asiento en el segundo coche detrás de la locomotora. Yo no sabía qué pensar en ese momento y me di la vuelta para preguntar si estaba listo. Él sonrió y me hizo bien con el pulgar. 

Después de dar un silbato y sonó la campana de bronce, pisé el acelerador y nos entramos en la noche, a través del valle. Nuestro camino a lo largo de los rieles estaban iluminadas sólo por las luces del tren. Tengo que admitir que estaba un poco espeluznante. 

Después de un rato, hice una parada y le pregunté si iba a venir al frente y conducir locomotora conmigo. Nunca olvidaré su respuesta cautelosa: "¿Crees que es posible? "Yo me reí y le dije:" Por supuesto que es posible! Michael, este es tu tren! " 

Accedió a sentarse a mi lado, después de una cierta distancia, le pregunté, "¿Quieres conducir la locomotora? ". Y en ese momento, se puso muy excitado. "¿En serio? ¿Puedo? ¿Es eso posible? ". "Por supuesto que sí", le dije y detuve el tren en otra parada para darle las recomendaciones básicas. "Simplemente suelte el freno y levante la palanca. Eso es todo lo que hay que hacer ".

Él siguió mis instrucciones y parecía un niño de 8 años. Él se rió y gritó de alegría en la noche iluminada por la luna fría mientras el tren se encontraba todavía en el valle oscuro de su rancho Neverland.

Entonces sucedió algo que nunca olvidaré. Recuerdo que miré mi reloj, y señaló que era casi medianoche. Una hermosa luna llena apareció en lo alto de una montaña, vimos muy bien. Sin previo aviso, Michael de repente cambió su cabeza hacia atrás y comenzó a gritar! Él gritó y se rió y me miró. Casi al mismo tiempo, en sincronía con Michael, yo hice lo mismo y empecé a gritar con él. Éramos dos adultos, un tren en miniatura, aullando bajo la luna llena. Fue una experiencia increíble, mágico, increíble. Él sabía cómo divertirse y disfrutar de la vida. 

Entonces uno de los momentos más memorables con Michael pasó. Se volvió hacia mí y dijo: "Me encanta revelar el niño en todos nosotros! Yo vivo para esos momentos y me gustaría poder llevar a cabo el niño que está dentro de cada individuo!". Estábamos realmente en la misma longitud de onda que la noche y nos convertimos en amigos cercanos en este momento, mientras estábamos sentados bajo la luz de la luna en su nuevo tren en miniatura."