KATHERINE, LA LOCOMOTORA:
La locomotora más grande de Neverland Valley Ranch contaba con el número de construcción 37936 y es un diseño Crown Metal Productions 4-4-0 reconstruida en el año 1973. Originalmente fue pintada de azul con detalles en plateado y dorado, con las ruedas rojas y tiraba de cuatro vagones.
Su construcción fue encargada para el parque Carowinds de Paramount en Carolina del Norte. Su constructor fue Crown Metal Products, un fabricante de locomotoras situado en Wyano, Pennsylvania.
Su vida original comenzó en 1897 en la plantación Barker and Lepine Plantation, Lafource Crossing, Luisiana, luego se trasladó a la plantación Laurel Valley en Tribodaux, Los Angeles, donde en algún momento pasó a llamarse “Melodia”.
En otra fecha desconocida, pasó a formar parte de la colección de Arthur LaSalle. En 1960, se vendió a Hubert Mitchell Industries y se almacenó en Hartselle, Alabama. Luego se vendió a James Freeland, donde función en Daniel Boone Village cerca de Hillsborough, Carolina del Norte. En 1963 se la vendió directamente a Carowinds, un parque temático de 398 acres ubicado en la autopista Interestatal 77 entre los estados de Carolina Del Norte y Carolina Del Sur. El ferrocarril fue parcialmente desmantelado después de la temporada de 1977 o 1978 para dejar espacio para una nueva área temática por lo que la locomotora permaneció inactiva hasta 1982, donde funcionóo en Wild World (ahora Six Flags America) en Largo, Maryland, pero regresó a Sandusky, Ohio en 1984, donde permaneció al menos hasta octubre de 1985.
Luego de su desmantelamiento fue comprada por Charles Kelton de Vermont, EEUU quien lo utilizaría como atracción, pero pronto desapareció el interés y fue puesta nuevamente en venta.
En abril de 1993 alguien la compró en reserva. Esa persona era Michael Jackson. Toda la maquinaria que se encontraba levemente deteriorada fue enviada a un taller de Mt. Pleasant, Iowa.
Michael Jackson nunca viajó al lugar pero constantemente llamaba por teléfono para comprobar los avances. Las pruebas de rodamiento se realizaron en el Midwest Central Railroad. Se le colocó un motor nuevo, una linterna frontal y nueva decoración en su frente.
Matthew Crull, ahora el presidente de directores del Midwest Central Railroad, era para entonces un trabajador por contratos y cuenta sobre el proyecto “básicamente terminé suspendiendo mi primer año de universidad, entrábamos a trabajar a las 3.30 de la tarde y salíamos a las 5 de la mañana. Trabajábamos básicamente viendo el reloj para cumplir con la fecha limite del contrato”
Como es de esperarse el tren era como ningún otro. Las modificaciones incluían letras de 24 kilates de oro, un sistema estereo de 45 mil dólares, y luceds a todo lo largo del tren. La caldera construida en Des Moines, incluyendo un sistema computarizado, el primero de su clase, que permite que el motor sea controlado por una sola persona y alimentado a propano
Debido a la popularidad del cantante, el proyecto fue secreto “todos debimos firmar para MJJ Productions que ni siquiera le daríamos a nuestras familias en lo que estábamos trabajando”.
El 20 de noviembre de 1993, seis meses después de la compra, la locomotora y los vagones modificados a pedido del nuevo dueño, viajaron destino a Neverland Ranch en California.
El tendido de la línea férrea fue realizada por un contratista profesional, que luego de las primeras pruebas debió modificar parte del tendido ya que la locomotora provocaba mucha fricción en las curvas.
Se dice que los vagones detrás del Crown provienen de un tren que operaba en Six Flags Over Mid-America en St. Louis.
La Locomotora miniatura CP Huntington
Rob Swinson, el “Hacedor de Sueños ” de Neverland Ranch, cuenta que una vez en sus inicios en el rancho, estaba hablando por teléfono con Jackson sobre su pedido de su carrusel cuando le mencionó a Michael que también construían en la empresa “Chance Rides” trenes en miniatura para niños diseñados para acomodar también a sus padres. Le envié nuestro catálogo completo de la línea de productos, que pronto tuvo en sus manos, y al abrirlo con fotografías del tren en miniatura de C. P. Huntington, inmediatamente exclamó: “¡Sí, Rob, yo también quiero uno de estos trenes!”.
Después del día en que se inauguró el carrusel del rancho, comento Swinson, que “la mayoría de los que compartían este momento con nosotros comenzaron a alejarse hacia la noche. Michael y yo continuamos montando en el carrusel, disfrutando el momento. Cerca de allí, el tren en miniatura con toda la magnífica iluminación y música estaba en la vía a la vista.”
“Michael, ¿te gustaría dar un paseo en tren?”, Le pregunté, como una idea de último momento. Se estaba haciendo un poco tarde, pero cuando me di cuenta de que estábamos en el “tiempo de Michael”, me alegré cuando comentó: “¿Crees que estaría bien, Rob?”. Creo que me estaba riendo por dentro cuando le aseguré que todo estaría bien, luego le recordé: “¡Michael, por supuesto! ¡Es tu tren!. Caminamos hasta el tren y recuerdo que me sentí un poco decepcionado cuando Michael seleccionó un asiento en el segundo fila, justo detrás de la locomotora. No pensé mucho en eso en ese momento, así que me di vuelta y grité para asegurarme de que estaba listo. Él sonrió y me levantó el pulgar. Después de tocar el silbato y la campana de metal, pisé el acelerador y nos adentramos en la oscuridad de la noche, corriendo a través del valle.
Nuestro camino a lo largo de la vía estaba iluminado únicamente por los faros del tren. ¡Debo admitir que fue un poco aterrador!. Después de un rato, reduje la velocidad del tren hasta detenerlo y le pregunté si quería viajar en la locomotora a mi lado. Nunca olvidaré su cautelosa respuesta: “¿Crees que estaría bien?”. Me reí y dije: “¡Sí, por supuesto que está bien! ¡Michael, es tu tren!. Se subió al asiento conmigo y volvimos a adentramos en la oscuridad.
Después de algunas vueltas más por las vías, le pregunté: “¿Quieres manejar la locomotora?”. Ahora se estaba emocionando mucho. ¿Yo podría? ¿Estaría todo bien?.
“¡Por supuesto que puedes!”, respondí, y reduje la velocidad para hacer otra parada a unos minutos de distancia para darle instrucciones básicas. “Simplemente suelta el freno de aire aquí y levante la palanca del acelerador. Eso es todo lo que necesitas”. Siguió mis instrucciones y ¡era como si tuviera ocho años! Se rió y gritó sus sentimientos de gran placer al aire fresco de la noche iluminada por la luna mientras su pequeño tren cruzaba el oscuro valle del Rancho Neverland.
Michael pareció perder la noción del tiempo, simplemente se estaba divirtiendo mucho. Entonces sucedió algo que nunca olvidaré. Recuerdo mirar mi reloj y ver que nos acercábamos a la medianoche. Una hermosa luna llena se había asomado por encima de una de las montañas ante nuestra vista. ¡Michael, sin previo aviso, de repente echó la cabeza hacia atrás y comenzó a aullar a la luna!. Él gritó, se rió y me miró. ¡Casi al mismo tiempo, en sincronía con Michael, eché la cabeza hacia atrás y comencé a aullar con él! ¡Dos hombres adultos, montados en un tren en miniatura, rugiendo ante la luna llena!. Fue una experiencia increíble, mágica y sorprendente. Sabía divertirse y disfrutar de la vida.
Luego ocurrió uno de mis momentos más memorables con Michael. Se volvió hacia mí y declaró definitivamente: “¡Me encanta sacar al niño que llevamos dentro de cada uno de nosotros!. ¡Vivo para estos momentos y desearía poder sacar el niño que todos llevamos dentro!. Realmente estábamos en la misma onda esa noche y nos conectamos, como amigos cercanos, en ese mismo momento mientras estábamos sentados allí, a la luz de la luna, envueltos en la noche, en su nuevo tren CP Huntington en miniatura.